Hoy entrevistamos a Rocío roldán. Árbitra del CTA de Madrid

   De nuevo volvemos a la Comunidad de Madrid, esta vez para encontrarnos con Rocío Roldán. Esta temporada es su 1ª arbitrando, y nos cuenta que ha sido una acertada decisión dar el paso, aunque, de momento, lo compagina con sus facetas de jugadora y entrenadora.

   Además, tiene a algunas personas a las que quiere dedicarles unas palabras.

   ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!


-¡Hola Rocío! Cuéntanos un poco sobre ti, una breve descripción.

   ¡Hola a todos! Me llamo Rocío Roldán, tengo 22 años, y llevo jugando desde los 9 años. Además, desde los 16 años también soy entrenadora y, actualmente, esta es mi primera temporada arbitrando. Estudio Magisterio, con mención en Ed. Física. 

- Juegas, y entrenas, en el Bm. Coslada. Además, juegas en el BMP Alcalá, ¿Cómo surge el paso de hacer el curso y arbitrar? 

   Pues, sinceramente, como entrenadora y jugadora estaba cogiendo cierta fama de protestona (y algo era, todo sea dicho jeje), y era una parte de que quería cambiar. Por eso pensé que la mejor manera era hacer el curso y ponerme en la piel de un árbitro. Además, me ha servido para adquirir unos conocimientos que antes no tenía 

- ¿Tenías algún referente en el mundo del arbitraje antes de empezar? 
   Siempre he sido de balonmano femenino, como jugadora, entrenadora y ahora como árbitra, y la persona que siempre he admirado ha sido Nandi Espino. Ha llegado a ASOBAL sin hacer mucho ruido mediático, con trabajo y constancia.

- Y una vez que llegas al CTA, ¿tienes a alguien que te haya marcado y a quien quieras dedicarle unas palabras? 
   La verdad es que si, son varias personas a las que quiero agradecer su paciencia y el tiempo invertido. Empiezo por Tamara Carmona y Alejandra Ruiz, mis tutoras en el grupo “escuela”, y a Joaquín Momprade, Me sentí muy arropada por todos, además de que depositaron su confianza en mí, cosa que me ayudó mucho para que, en el pasado diciembre, pudiera subir de categoría al “Grupo 3”. 

- ¿Cómo preparas un partido?
   Tengo que reconocer que soy bastante friki. Si es algún equipo femenino, casi con seguridad, los conoceré. En caso de ser masculino suelo preguntar, bien a gente que pueda conocerlos, a otros árbitros y/o al tutor, si fuese necesario. Además, durante los calentamientos, intento observar lo máximo posible como se preparan, para poder tener una idea. 
 
-Antes de empezar un partido, ¿tienes alguna manía o forma concreta de actuar, alguna manía o forma de ayudar a concentrarte? 
   Pues de momento creo que no, pero todo se andará, que aún hay tiempo. Más allá de comprobar que lo llevo todo antes de arbitrar, no tengo ninguna manía.

- ¿En qué crees que has cambiado, desde que empezaste, desde el punto de vista arbitral? 

   Pues, como a todo el que empieza, voy mejorando poco a poco en el tema de las sanciones, que siempre es lo que más miedo da. Con el trabajo, aunque aún me equivoco, empiezo a distinguir sanciones progresivas de sanciones directas. Además, cuando empecé tenia más miedo al error, era más tímida (bueno, y aún lo soy), pero con el paso de los partidos voy trabajando un poco más la presencia, el lenguaje corporal. He llegado a arbitrar un partido senior y creo que no llegué a hacerme muy chiquitita. Aún queda mucho por trabajar, pero voy poco a poco. 

-¿Cuál ha sido el momento más divertido que te ha pasado arbitrando?

   ¡Este lo tengo claro! Durante un cadete femenino, pitando con el compañero Rubén, cuando fuimos a comenzar la segunda parte, escuché por el pinganillo como unas de las jugadoras le decía: “¡Arbi, que te olvidas la mascarilla!”. El se lo tomo con filosofía y le comentó que los árbitros no la usamos en los partidos. Sus compañeras de equipo no pararon de reír por este despiste. ¡Eh, pero la muchacha lo dijo con la mejor intención! 

- ¿Y el más difícil? 
   Más que difícil, incómodo, ya que, por suerte, todavía no se me dieron situaciones complicadas. Durante un partido cadete, uno de los equipos propuso jugar en una pista que no cumplía con las medidas y el otro equipo no estaba de acuerdo. Las opciones eran jugarlo o suspenderlo y que decidiera el Comité de Competición. Hacer de mediadora en esas situaciones, no es nada sencillo. 



 
- ¿Cuál es tu meta dentro del arbitraje? 
Pues después de empezar, y descubrir que me gusta más de lo que esperaba, quiero seguir aprendiendo y formándome, compaginándolo, mientras pueda, con las facetas de jugadora y entrenadora. Más adelante ya veremos. 

-Entrenas, juegas y arbitras a la vez, ¿Qué te aportan las dos primeras facetas para ayudarte a mejorar como árbitra?
   Pues al estar haciendo las tres cosas a la vez, puedo decir que todo me ayuda para todo. Como jugadora y entrenadora, me sirve para tener un conocimiento de las reglas y poder entrenar mejor a mi equipo, evitando caer en irregularidades. Y cómo árbitra, al tener los conocimientos de jugadas concretas, de las posiciones y eso, me sirve para poder anticiparme a lo que va a suceder (¡o al menos intentarlo! Jeje). Y, por supuesto, el temperamento, que ya lo voy relajando. 

- Primero fue Cristina Fernández, después Agatha Gracia y ahora Nandi Espino quienes llegaron a ASOBAL. ¿Estos referentes pueden ayudar a las chicas que quieran arbitrar y aún estén indecisas?
   ¡Por supuesto! Tener unos referentes femeninos que están en la máxima categoría del balonmano español, es algo que sirve como motivación. Las chicas que lo vemos podemos pensar: “si ellas han llegado, yo también puedo” 
 
- ¿Qué consideras necesario para fomentar el arbitraje femenino? 
   Como mínimo, que se nos den las mismas oportunidades que a nuestros compañeros. Pero aquí si quiero hacer hincapié en una cosa: tampoco debe existir discriminación positiva. Creo que es igual de perjudicial para nosotras que, por ser mujeres, se nos faciliten las cosas y que, haciendo menos llegamos más lejos que nuestros compañeros. 

- ¿Cómo ves el arbitraje en Madrid?
   ¡Increíble! Hay mucha gente involucrada que lleva mucho trabajo a su espalda. El compromiso de todos los árbitros es muy alto. Y eso se nota, dentro y fuera de la pista. No hay más que ver la última jornada de formación, que fue muy enriquecedora. 
 
- ¿Cómo trabajáis semana a semana en vuestro CTA? 
   Más que de forma semanal, se trabaja de forma mensual. Tenemos que hacer unos test de reglas y otros de párrafos. Además, tenemos una charla de formación sobre la que, después, nos hacen otro test. Lo que sí, semanalmente, le enviamos cortes y planteamos dudas a los tutores de cara a evitar errores en la semana siguiente. Y muchas veces son los mismos tutores los que nos mandan un corte de algún partido para generar debate dentro del grupo de trabajo 



- ¿Qué crees que falta para terminar de enganchar a las personas indecisas y que se animen a arbitrar?
   Sobre todo, que no tengan prisa. Las cosas no van a salir a la primera, pero eso no debe servir como escollo para no lanzarse a probar
 
- ¿Qué le dirías a los árbitros jóvenes para animarlos a continuar? 
   Que deben de probar. Que no hay que pensar en si te van a gritar o no. Hay que aventurarse, probar y, oye, quien sabe que puede pasar. Además, conoces a muchísimas personas, haces amigos que no te esperabas, compartes experiencias, anécdotas y conocimientos 

- Esta temporada ha ascendido una pareja mixta a ASOBAL. ¿Crees que es el punto de inflexión que faltaba para romper ese tabú sobre las parejas mixtas?
   Pues realmente espero que lo sea. Ojalá que sí. Puede haber más parejas mixtas. Debería dar igual que sean chico y chica, si arbitran bien, no debería ser un hándicap 
 
- ¿Cómo te ves dentro de unos años? 
   Espero poder estar ejerciendo como maestra, que para eso me estoy preparando. Respecto al balonmano, no lo sé. Quiero seguir ligada a este deporte, de una forma u otra. 

- ¿Qué te aporta el arbitraje a nivel personal?
   Principalmente el control de emociones. Soy una mujer muy visceral y me cuesta reprimirme. Me ayuda a ser más tranquila, tanto dentro como fuera de la pista. 
 
- ¿Qué haces los fines de semana que no tienes partidos? 
   ¡Pocos findes tengo así! Pero cuando tengo alguno aprovecho para ir a jugar al pádel, a visitar a mis abuelos al pueblo y, sobre todo, hacer vida social con mis amigos y mi novio. Aunque con esta temporada tan rara, lo normal es que esté de pabellón en pabellón 

- ¿Un libro?
   Maldito Karma, de David Safier 
 
- ¿Serie o película favorita? 
   Peter Pan, la gran aventura 
   Como serie, sin duda, la casa de papel 
 
- ¿Un sitio para perderte? 
   ¡Granada! 

- Para terminar, ¿Hay algo que quieras compartir con nosotros?
   Me gustaría animar a todo aquel que tenga un poco de curiosidad en el arbitraje que se apunte al siguiente curso, porque no se van a arrepentir. Incluidos los oficiales. 
Y hacer un llamamiento a las personas que están en las gradas: intentamos hacer nuestro trabajo lo mejor que sabemos. Nosotros, especialmente cuando terminamos el curso, también estamos aprendiendo. No nos ataquéis, no somos enemigos, queremos disfrutar como los demás de los partidos. 


Comentarios

Entradas populares de este blog

Hoy entrevistamos a Eder Solinis. Árbitro de la Federación vizcaína

Hoy entrevistamos a: Amara Alós

Hoy entrervistamos a: Miguel Angel Indiano. Árbitro de Madrid